Del griego antiguo Hygeia que significa salud, se la conoce también como Higía, o Hygieía, o Hygeia. Diosa de la Salud, la higiene y la prevención. De su nombre proviene la palabra higiene.
En la mitología griega, Higea era hija de Asclepio, el dios de la medicina y Lampecia, hermana de Telesforo, Yaso y Panacea “la que todo lo cura”.
A Higea se la representaba como una mujer sentada o de pie sosteniendo un cuenco en la mano y en la otra una serpiente que vierte su veneno para ser utilizado medicinalmente. La serpiente que muda su piel, es signo de renovación, de sanación. Estos elementos simbolizan el uso del antídoto con fines curativos.
La diosa Higea representaba el arte de vivir saludablemente y la sabiduría para curarse uno mismo. En ella se inspira este proyecto de acompañamiento terapéutico que tiene su pilar fundamental en la confianza en la auto-curación, en que los recursos que necesitamos para estar en equilibrio, ya habitan en nosotr@s. La terapia y el terapeuta acompañan el proceso desde un lugar de respeto y escucha